ENTREVISTA A LUIS ESTRADA: ¡QUE VIVA MÉXICO! ES CRUEL Y PROVOCADORA
El director
mexicano se ha tomado su tiempo entre película y película
para abordar alguna problemática que ha distinguido a cada sexenio de nuestro
país, una tradición que comenzó con La ley de Herodes en 1991 y que parece no
tener intenciones de finalizar, sobre todo ahora que ha llegado a los cines su
último largometraje, ¡Que viva México!
- ¿Cómo sienten que la
gente va a recibir esta película?
- Mira
los altibajos es que hubo una pandemia que literalmente puso en riesgo la
existencia de los cines, solo de México si no del mundo, el cine mexicano que
siempre ha estado en un permanente estado de crisis, a veces mas profunda a
veces menos profunda, pero estaba o esta probablemente en uno de los momentos
mas complicados porque la pandemia trajo consigo una serie de cambio de hábitos
de como consumir el entretenimiento además de muchos otros.
Pero
pues ahora sí que si enfocándonos en la película, hacia el cine, hubo muchos
cambios de hábitos normales, la gente se acostumbro a quedarse en sus casas a
ver las películas que no quisieran ver si no las que les ofrecían la
televisión, las plataformas y el reto de la película es extraordinario porque ha
sido muy complicado llegar a él.
Porque
creo que es un reto que implica mas que solo el éxito o el fracaso de la
película creo que habla de lo importante que es volver a reconectar con el cine
en su espacio natural que son las salas de cine y el estar ahí viendo una
película con tus 5 sentidos estando con personas que no conoces compartiendo
esa experiencia.
- ¿Cómo fue la
construcción de tantos personajes tan diferentes?
-Pues
todo esta planteado en el guion, los diálogos son coherentes siempre te
manifiestan al personaje desde el inicio, tiene su desarrollo y una potencia en
cada uno de ellos. Entonces cada uno es diferente.
Para
los actores es un disfrute hacer un personaje en este caso algunos les toco
hacer tres, entonces es un gozo para mi el sobreexplotar esas pasiones
actorales por triple partida.
- ¿Cómo te adaptas a los
cambios que hemos tenido en nuestra sociedad a lo largo de los años?
-Vivimos tiempos muy cambiantes. Efectivamente mi última película antes de esta fue la ‘’Ley de Herodes’’ del 2014 y muchas cosas pasaron entre otras cosas la pandemia que hizo que retrasara esta película dos años más, también tuve muchos otros obstáculos porque me costó mucho trabajo porque es una película muy ambiciosa, una película muy cara una película en la que yo quería contar todo lo que se había quedado pendiente a lo largo de estos años.
- ¿Cómo es diferente el
enfoque de esta película al de las otras que has tenido?
-Trato
de tener siempre el dedo en el renglón a la hora de escribir un guion, se
perfectamente lo que quiero plasmar y escribo para eso, también sentí que era
urgente hacer una película sobre este caos que se ha generado con este nuevo
gobierno y que la gente tiene que reflexionar sobre ella y que tenemos que
jalar todos para mejorar y ese es el sentido que le encuentro a mis películas.
Un espejo muy claro de la sociedad, para reflexionar y ser mejores.
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